En Recetas Nestlé® te damos unas cuantas ideas para que este año mejores tus hábitos alimenticios.
Con el final de diciembre y el comienzo de enero, además de unos cuantos deseos, también es muy común tener algunos propósitos de Año Nuevo para mejorar nuestros hábitos y, a final de cuentas, nuestro estilo de vida.
Entre estos objetivos usualmente pensamos en el amor, la ambición profesional, logros personales y cómo mejorar nuestra salud. Teniendo en cuenta estos dos últimos puntos, una excelente idea es plantearnos algunos propósitos alimenticios para este nuevo año.
Por eso, en Recetas Nestlé® queremos ayudarte con unas cuantas ideas relacionadas con el consumo de alimentos y la cocina. Además, vamos a estar acá acompañándote todo el año con contenidos y recetas que seguramente van a facilitar que alcances tus objetivos.
Compartimos 10 propósitos alimenticios que puedes tener en cuenta para mejorar tus hábitos.
- 1. Ten una alimentación más balanceada
Con el final de diciembre también se reducen considerablemente las reuniones familiares y con amigos en las que los regalos y, sobre todo, la comida son protagonistas. Es posible que durante el mes comiéramos un poco más de lo normal.
Pero con el inicio de un nuevo año, es momento de retomar algunos hábitos saludables y que son muy beneficiosos para nuestro estilo de vida. Pensar en cómo tener una alimentación balanceada puede ser un comienzo fabuloso.
¿Qué es la alimentación balanceada?
: Nos referimos a tener en cuenta cuáles son los platos y las comidas que vamos a consumir a lo largo del día, sin caer en excesos o, por el otro lado, en no comer lo suficiente. Lo ideal es tener esa sensación de satisfacción, sin quedar muy llenos, e incluir los diferentes grupos alimenticios.
Esta es una forma de clasificar la comida. Lo importante es que cada uno de estos esté presente a diario.
- Frutas y verduras.
- Cereales.
- Tubérculos (papa, taro).
- Huevos, carnes (rojas y blancas) y pescado.
- Legumbres (granos como lentejas y frijoles), semillas y frutos secos.
- Lácteos.
- Grasas.
- Agua.
2. Consume menos azúcar y sal
Este segundo propósito está muy relacionado con el anterior y la búsqueda de una alimentación más balanceada. Hoy en día es normal encontrar todo tipo de productos procesados en los que se usa una cantidad gigantesca de azúcar industrial que nuestro cuerpo, en realidad, no necesita.
Lo ideal sería que el azúcar que precisamos venga de fuentes mucho más naturales y saludables, sin aditivos ni conservantes. Es decir, fuentes vegetales, como las frutas y las verduras.
Con la sal sucede algo similar. Nos hemos acostumbrado a usarla a diario como un ingrediente que se le añade a casi todos los platos, y esto sin hablar de la comida que no preparamos en casa, sino que compramos en supermercados, tiendas o restaurantes.
La recomendación es usarla únicamente en cantidades pequeñas, por ejemplo, para resaltar algunos sabores. La Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que los adultos no deben consumir más de 5 gramos de sal al día.
3. Cocina mucho más en casa
Si en serio queremos tener un control sobre nuestra alimentación, los ingredientes que se usan, la cantidad de sal que se añade y los sabores que más disfrutamos, la mejor opción es aprovechar al máximo la cocina que tenemos en casa.
Si no tienes mucha experiencia, te podemos ayudar con nuestra guía básica de ollas y sartenes o nuestro artículo sobre cómo elegir y cuidar una sartén de acero inoxidable. Si quisieras enfocarte en hacer postres, te damos consejos para hacer pasteles y 7 postres para iniciarte en la repostería.
Por último, te dejamos unas cuantas recetas fáciles para que empieces este año con la mejor actitud en tu cocina:
- Hot cakes clásicos, preparados con Leche Evaporada CARNATION® CLAVEL® y Leche Condensada LA LECHERA® Sirve Fácil.
- Espagueti en salsa de cilantro, preparados con Media Crema NESTLÉ®.
- Salmón a la naranja.
4. Aumenta el consumo de frutas y verduras
Desde la infancia hemos escuchado que es muy importante comer frutas y verduras a diario, pero en muchos casos, con el paso de los años y el afán que trae el trabajo o los estudios, parece que nos olvidamos de esas enseñanzas.
Las frutas y verduras son fundamentales para cuidar de nuestro cuerpo, pero además son estupendas para hacer todo tipo de platos. Se pueden comer crudas, otras se pueden asar, algunas van muy bien cocinadas al vapor o, incluso, las más grandes, se pueden rellenar y llevar al horno.
En un aspecto decorativo, también son muy buenas para darle color a tus platos. Anímate a combinar los sabores de las frutas y verduras añadiendo, por ejemplo, rodajas de manzana, naranja o mandarina a tus ensaladas.
Recetas recomendadas
5. Toma más agua
Es muy importante tener el organismo hidratado para mantener nuestro cuerpo y nuestra mente funcionando correctamente. Una buena idea es remplazar algunas bebidas gaseosas o alcohólicas por un vaso con agua, tu organismo lo va a agradecer.
Vale la pena tener en cuenta que el agua también la podemos encontrar en frutas y verduras, que pueden llegar a tener una gran cantidad de este líquido en su composición. Aumentar el consumo de estos alimentos también te puede ayudar a tomar más agua.
Lo más recomendable es beber al menos 2 litros de agua al día, lo cual equivale, más o menos, a unos 8 vasos.
6. Mantén tu cocina más limpia y ordenada
Acá nos alejamos un poco de los propósitos alimenticios para Año Nuevo, aunque tiene una relación muy importante con el espacio en el que preparamos todos esos platos deliciosos con los que sorprendemos a nuestros seres queridos.
Una cocina ordenada y limpia te ayuda a saber cuáles son los alimentos e ingredientes que tienes a tu disposición, cuáles están cerca de echarse a perder y a evitar que microorganismos o insectos dañen tu comida.
Para ayudarte en este punto, te enseñamos cómo quitar el quemado de una olla y cómo quitar el cochambre de la cocina. Además, te explicamos cómo cuidar y usar bien la espumadera y los cucharones, por qué tener un porta utensilios en tu cocina y cómo ordena tu alacena.
7. Aprovecha los alimentos al máximo para no desperdiciarlos
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), “un tercio de los alimentos producidos a nivel mundial se pierden o se desperdician”. Vale la pena volver a leer la frase anterior una vez más. ¡Es demasiada comida que termina en la basura!
Por eso este propósito alimenticio para Año Nuevo es tan importante para nosotros. Es necesario que al momento de ir al supermercado pensemos muy bien y tengamos en nuestra lista no únicamente qué comida necesitamos, sino cuánta solemos gastar antes de que se eche a perder.
La FAO tiene algunos consejos sobre este tema:
- Aprovecha la fruta madura para preparar postres, jugos o batidos, en lugar de arrojarla a la basura.
- No juzgues todas las frutas por su apariencia, a veces las mejores no son las más estéticas.
- Ordena tu alacena para tener los productos más antiguos en la parte de adelante, para que los uses y no se pierdan.
- Congela o refrigera la comida que sobra en casa e, incluso, la que no terminaste en un restaurante. Después la puedes recalentar o usar en otra preparación.
8. Un día sin carnes
En algunos lugares se ha popularizado el término “lunes sin carne” para reducir el consumo de los alimentos de origen animal. Las razones para hacerlo varían desde causas sociopolíticas, hasta quienes lo hacen como un reto meramente personal.
Lo cierto es que tener un día libre de cualquier tipo de carnes tiene diferentes ventajas. Por un lado, nos obliga a ser más creativos al momento de cocinar y buscar sabores que nos gusten. También es una excusa perfecta para aumentar el consumo de frutas, verduras y legumbres.
Por eso, te dejamos algunas recetas libres de alimentos de origen animal.
- Coditos a la crema con manzana, preparados con Media Crema NESTLÉ® y Queso tipo manchego NESTLÉ®.
- Ensalada de leguminosas, preparada con Salsa de Soya MAGGI®.
- Pasta en salsa de aceituna, preparada con Media Crema NESTLÉ®.
9. Come más seguido con tu familia
Un propósito alimenticio para este año y que va de la mano con ese objetivo de cocinar más seguido en casa. Nada más piensa en diciembre, este mes que acaba de pasar, con todas las reuniones familiares alrededor de la comida.
No hay que esperar a que termine el año para reunirnos con nuestros padres, tíos, primos, abuelos y hermanos. Ni siquiera hay que esperar un cumpleaños o cualquier celebración. La mejor excusa es simplemente compartir en familia.
10. Lleva tu almuerzo al trabajo o la universidad
Cerramos esta serie de propósitos para Año Nuevo relacionados con alimentación pensando en el final de las vacaciones y el regreso a las oficinas o las universidades. Aunque ahora muchísima gente trabaja desde casa, hay quienes prefieren estar en otro espacio para trabajar.
Vamos a hablar de dos grandes ventajas de llevar el almuerzo a la oficina o a la universidad. La primera es que puedes elegir qué vas a comer y prepararlo a tu gusto, con los ingredientes que quieras. Segundo, está el lado económico. Usualmente es más barato hacer tu almuerzo, en lugar de comprarlo.
Fuentes:
Insignia de la Nutrición. Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.
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